El oráculo de la luna

El oráculo de la luna es del autor Lenoir, Frédéric y trata de

Año 1545. Los monjes de un monasterio calabrés acogen a un desconocido  gravemente herido. Poco después, la muerte por envenenamiento de dos frailes de la comunidad suscita una desconfianza inmediata en el recién llegado, todavía convaleciente, que se ve obligado a contar su asombrosa historia para demostrar su inocencia. La historia de Giovanni es la historia de un joven y humilde campesino del país; un muchacho intrépido atrapado por su destino y lanzado a un viaje plagado de intrigas, pasión y aventura. Un peligroso camino que había emprendido tras enamorarse perdidamente de la hija del Dux de Venecia,  y que le iba a llevar a convertirse en discípulo de uno de los mayores maestros de astrología de la época. Descubre así un nuevo universo de erudición, que él cree que lo hace merecedor de su noble amada, pero que también lo obliga a cumplir una importante misión en nombre de su maestro: entregar una misteriosa carta al Papa en Roma, por la cual será perseguido sin tregua. «El oráculo de la luna nos transportan por el espacio y el tiempo. La variedad de sus escenarios y la lejanía de la época evocada, nos hacen sentir todas las delicias y vértigos de los viajes imaginarios.» La VanguardiaS.XVI. La gran aventura iniciática por todo el Mediterráneo de un joven calabrés impulsado por un amor prohibido y la voluntad de su maestro: la entrega de una misteriosa carta al Papa.Frédéric Lenoir es de nacionalidad francesa, es filósofo, editor, historiador de las religiones y colaborador habitual de los principales medios escritos. Redactor jefe del Monde de religions, es autor de ensayos y coautor de  una novela anterior, publicada también en DeBolsillo, con una gran acogida de público, La promesa del ángel, que la crítica comparó por su apasionante trama de intriga y su erudición con El nombre de la rosa. Ha dedicado quince años a la redacción de El oráculo de la luna. www.fredericlenoir.com «Es mi intención que el libro sea leído en todo el mundo» -Frédéric Lenoir.